Qué tanto nos conocemos, qué podríamos decir uno del otro que profundice mas allá de dos cuerpos. Acaso conoces de mis miedos, mis sueños, mis pesadillas?
Nada puedes hablar de lo que siento, de lo que pienso por las noches antes de caer dormida. Nada puedes decir de la manera en la que me acomodo, qué bebo por las mañanas, qué camina en mi mente durante el dia...
Cuánto podría yo apostar si alguien me preguntara cuál es tu lado de la cama, la posición en la que te acurrucas, de qué hablas cuando sueñas, cuál es tu desayuno favorito, tu camisa perfecta… Y tu no conoces el color que mas me luce o algo tan natural como cuántas veces al día lavo mis dientes, tan simple como la talla de mis mil zapatos? Si te preguntaran por mi qué tanto podrías decir, cuáles serían tus referencias? Seguro las mismas que las que yo daria de ti...
Lo sé que no podrías asegurar cuál es mi vestido favorito, qué escucho o qué leo, con que me lleno el alma o el ego; qué me pasa por la cabeza cuando no me siento cuerda... Tampoco podríamos responder a qué nos hace triste, por qué lloramos, qué nos hacer vibrar el cuerpo; o con cuanta frecuencia nos desarmamos. Jamas sabrias por qué cocino...
Yo no soy capaz de contestar un cuestionario... Apenas se quién eres, lo poco que sé quiza lo aprendi porque me doy a la tarea de entender a las gentes que me interesan y entonces aveces me basta con mirar a los ojos para encontrar pistas de sus secretos... Tus secretos? Los andas escondidos en lugares oscuros y remotos del alma; le pasaste doble llave a alguna puerta y los ahora viven plantados en el medio de tu pecho entre el corazon y los pulmones, haciendo presion. Una herida palpitante que nunca dejas de sentir? Se quedarán viviendo contigo por siempre? Seguro te llenan el alma de recuerdos, de esperanzas, de deseos... Mis secretos sabes donde estan? Yo los sepulto a todos en lugares remotos y les pierdo el rastro, los dejo de recordar. Mis dolores y penas se me van cayendo, tanto siempre vendra alguno mejor, un recuerdo nuevo que no me pondra triste ni me hara llorar.
Veo la vida como una botella de un buen vino, descorchada para que respire, simplemente esperando que la degustemos. No mas. Yo te considero un libro abierto a media lectura, uno de esos que lees despacio para no llegar a un fin. Y yo? Yo me veo como una gata y me encantaría descansar en tu regazo, refugiarme en ti solo por momentos sin dejar de ser yo, sin dejar mi libertad... Solo queriendote y ronroneándote cuando te vea y necesitandote cuando te necesite; las demás horas me dormiria despacio sabiendo que estas en otro lado pero que vas conmigo a algun lugar. Soñaria que paseo por lo techos y le canto a la luna...
Entretenerse con poco, a mi me basta hasta una piedra. Tengo la imaginación de un niño y la fragilidad de un insecto… si mi alma se quiebra los pedazos que caen los guardo en cajas bajo la cama, tengo colección de rompecabezas... Te tengo en un mundo propio, con un montón de enredos, sabes que pinto y todavía lo hago cuando me deprimo o cuando me alegro demasiado, un choque de extasis y emociones, asi recupero la inspiración que ya hace tanto tiempo alguien se llevo entre sus dedos.
Al final será que tu y yo nos parecemos? Será que por eso me pareces interesante, sin sonar narcisista obviamente, pero sera que buscamos la misma comodidad y una manera de ordenar los miedos? Tendremos algo en común? Yo te tengo entretejido y esto va mas alla de mis sueños o de fabricarme ideas y mundos propios donde me quedo viviendo entre flores y colores.
Y no tiene por qué no ser fácil: ser yo o ser vos, ninguno de los dos es tan difícil como aparentamos… seria mas bien como una mezcla entre hacer lo que se quiere y vivir como se debe…
