Las ilusiones se disfrazan de amor,

les encanta empolvarse la cara, vestir sus mejores ropas y sentarse quietitas a esperar que pase un necesitado de amor, entonces le prenden la mano y empiezan a caminar despacio cerca de su sujeto-presa. Empiezan a llenarle la cabeza de ideas fabulosas y de imagines que ellas mismas fabrican.
Es facil equivocarse, es como ver a Jose y Juan vestiditos de mujer, con sus zapatos de tacon; a lo lejos probablemente confundas sus prefilados cuerpos y sus finas manos con las de una femina, pero no... por mas hermosos trajes que vistan y por mas refinados que sean sus modales la naturaleza los ha hecho masculinos y por alguna razon aunque trates de disimularlo, ocultarlo o maquillarlo la verdad siempre sale a la luz por mas triste que sea.
Las ilusiones hacen cosas parecidas,
les encanta acomodarse donde la luz no les pegue de frente, se visten y salen a la calle a robar corazones, se meten en tu casa y en tu vida sin darte cuenta, es mas son capaces de leerte la mente y de robarte los suenos, asi se alimentan de suenos robados.
Y van de tu brazo orgullosas con sus carteras y sus maletines bien agarrados, se toman cafes en el bar de la esquina de tu casa y se mufan de sus logros. Son orgullosas y egoistas, siempre listas y atentas a conseguir algo mas adelante del camino a costa de cualquier cosa, a costa de tu vida.
Las he visto cenando juntas, y bufandose de todo aquel o aquella que se rindio a sus pies y una vez terminado su trabajo vuelan lejos, se escapan sin mas ni mas, sin dar la mas minima razon; solo tan sus cosas, empacan velozmente y sin lagrimas en la cara se sacuden el cabello y siguen adelante dejandote debastado...
Muchos les ruegan que regresen, que los amen, que no los olviden y tratan de perseguirlas... Algunas veces les ofrecen tantos suenos que ellas mismas, que padecen de gula y con su egocentrismo, se quedan y se alimentan hasta que ya no pueden mas, hasta casi reventar, entonces solo entonces dejan a su presa que ya no tiene nada que dar... Y la pobre criatura se queda sumida en oscuridad por algun tiempo, si se llevan su luz, y es solo con un acto de fe que se levanta y se da cuenta lo tonto que fue.
Una vez despierto te das cuenta que no hay recuerdos y que las pocas memorias que te quedan estan todas sujetas a su ego, al momento en que renunciaste a tu personalidad para darle espacio a la suya.